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Alabama Shakes, Beach House, Björk, Camila Moreno, Champs, Christina Rosenvinge, Chvrches, Cristobal Briceño, Dënver, Dúo Niágara, Deerhunter, Discos 2015, Everything Everything, Father John Misty, Grimes, Jose Gonzalez, Lana Del Rey, Mac Demarco, Marina and The Diamonds, Miami Horror, Planeta No, Purity Ring, San Cisco, Sufjan Stevens, Tame Impala, The Bird And The Bee, The Dø, The Vaccines, The Weeknd, Tobias Jesso Jr., Tus Amigos Nuevos
Preámbulo casi inutil
Como cada año trato de estar al día en los discos y las cosas que puedo escribir sobre ellos. La verdad es que este año hubo una cantidad moderada de lanzamientos que me gustaron, pero los que hubo dieron harto jugo y les di muchas vueltas; Björk el primero del año se ganó un lugar en mi corazon de poeta, aún siendo un disco raro musicalmente. Por otra parte los discos más synth pop son siempre mi predilección, dígase; Purity Ring, Chvrches y ahora último Grimes, que son discos que me encanta escuchar, más no escribir sobre ellos porque es una sensación tan instantánea que no se puede explicar en un texto, o al menos mi educación de liceo municipal no puede.
Agregué sonidos que tenía medio abandonados, por el lado más rock como Alabama Shakes o The Vaccines que me han dado una gran sorpresa o Mac Demarco (mi nuevo protegido). Por el lado que me siento más cómodo escribiendo es en los discos en mi idioma, este año el gran Lo Nuestro de Christina Rosenvinge o el de Dënver, aunque siempre podré serle fiel a Lanita o a Briceño que se auspició este año con Dúo Niágara.
En cuanto al orden de los discos: es alfabético o esa era la idea… la cosa es que el orden no quiere decir nada respecto a la «nota» del disco. Quizás el tamaño de las carátulas es decidora, pero al final-final mi criterio no es confiable. Hay días en los que todas las canciones me parecen fomes y repetitivas pero hay otros en los que la belleza de todo me hace desear poseer los pabellones auditivos de todo el universo que me permitieran escuchar más discos al mismo tiempo.
Alabama Shakes – Sound & Color
Si ya habían dado cátedra de cómo ser gustados por antiguas y nuevas generaciones en su trabajo anterior, con Sound & Color asistimos a la casi consagración de su estilo salvaje, bravo, potente. El Soul es suplicio, es tortura pero a la vez sexy. Brittany Howard con su banda saben cómo dotarlo de estas características; sus juegos de voces, gritos y gemidos más las terribles (en el buen sentido) guitarras que van y vienen y vuelven a aparecer con más fuerza nos hacen pensar que aunque seamos unos ignorantes sobre estos estilos podemos sentirnos extrañamente hechizados por su música por que toca la fibra y apela al dolor, la rabia, la pasión, la sensualidats y otras sensibilidades tan humanas.
Beach House – Depression Cherry
Nos cuasi morimos cuando escuchamos el sonido que había tomado Beach House en Sparks, el primer single de Depression Cherry. Por fortuna ese noise, que aún no termino de tragar, estaba presente solo en ese corte, que parece casi una rareza entre tantas canciones con la tradición que nos tiene acostumbrados el mejor grupo dream pop del último tiempo. Mis favoritas Levitation, Space Song, 10:37, PPP, Wildflower que tienen ese enigmático sonido que hace pensar en una especie de código indescifrable para hacer canciones que se pasean con esa fluidez mágica capaz de calmar hasta la más avara de las ansiedades.
Beach House – Thank Your Lucky Stars
Un disco nuevo de Beach House es todo un lujo… pero DOS supera todo lo imaginable, así sentimos el precipitado anuncio de Thank You Lucky Stars que salía menos de dos meses después de Depression Cherry. ¿Era una broma? No, era mejor que una broma, era verdad. Asistimos a una de las exhibiciones más bellas del año, la continuación (aunque en rigor no es así) de un puñado de canciones que nunca me canso de escuchar. El radiante coro de She’s So Lovely con ese “Castles in the sand, Money in your hand. And all I have to do Is everything for you” es para agarrarlo, darse por pagado y morir feliz y satisfecho. Otra patada en la mente es All Your Yeahs o las guitarras finales de One Thing como si se tratara de una excéntrica colaboración de Daft Punk, y es que parece que en los finales de las canciones se lanzaran el lomo vetado a la parrilla (luego son veganos dioh mio) porque a medida que avanza Elegy To The Void y Rough Song la cosa va tomando exquisitas texturas. Por último Somewhere Tonight con deliciosa cadencia te mueve como si fueras la bacteria del ébola infectando un indefenso cuerpo, lenta y satisfactoriamente… un manjar de manjares. Por esto y mucho más mi favorito es Thank Your Lucky Stars por lejos.
Belle & Sebastian – Girls In Peacetime Want to Dance
Aunque la fórmula de los escoceses puede parecer agotada no es tan así. Girls In Peacetime Want to Dance guarda momentos muy destacables de frescura, como en Nobody’s Empire o Play for Today; de sorpresa como en las bailables The Party Line o la mejor de todas, lejos de ser muy larga, Enter Sylvia Plath o las melodías de antaño en The Cat with the Cream. Sin ser vendedor de humo hay que decir que Belle & Sebastian hace rato que no le dan al clavo medio medio como en los lejanos noventas-dosmil pero si algo es cierto es que si no se traicionan a sí mismos y siguen trabajando tan bien y con tanta rigurosidad como hasta hoy en algunos años más escucharemos un nuevo If You’re Feeling Sinister y Belle & Sebastian volverá a ser el chicle de moda.
The Bird And The Bee – Recreational Love
TBATB son como la brisa fresca en medio del calor californiano, ese que nos venden en los filmes hollywoodenses… Bueno, nunca he estado en California pero sí en la playa popular de donde vivo y debe ser algo parecido, supongo. A lo que iba con todo esto es que lo fugaz y volátil del verano puede ser perpetuado con canciones como las de Recreatinal Love, hechas para disfrutar del momento, sin más afán que el de gozar y ser parte de una sensación colectiva de inmortalidad mentirosa tras esos lentes onderos, olor a protector solar y como música de fondo su Young and Dumb o un Los Angeles ¡Vamos! Todos lo necesitamos, todos lo disfrutamos.
Björk – Vulnicura
Después de 7 discos de estudios (8 si contamos el que grabó cuando tenía 11 años) y un sinfín de rarezas llega a nuestros computadores Vulincura, un disco accidentado, víctima de una de las más emblemáticas filtraciones del último tiempo. Fue producido por el venezolano, Alejandro Ghersi, más conocido como Arca que como ya todos saben ha trabajado para el disco de FKA twigs y el Yeezus de Kanye West y de quien Bjork contó hace un tiempo para Pitchfork que a pesar de sus primeras reticencias a trabajar con gente tan fan de ella, logró una conexión perfecta con el latino que dio en el clavo en la musicalización de los sentimientos de cada canción. Con las repeticiones y el examen de las letras, el álbum va tomando vida y aprecio por parte del oyente. Sin ser un gran fan de Björk entusiasma el hecho de conocer mediante sus más recientes composiciones a una mujer tan esquiva y hermética pero que ha dedicado su vida a la más sincera de sus pasiones, hacer música.
Camila Moreno – Mala Madre
Es difícil escuchar a Camila Moreno intentando desmarcarla del folk chileno pasado por el filtro Björk. Sí, son etiquetas y hay etiquetas difíciles de quitar. Eso mismo es lo que hace pensar a Mala Madre como un disco más maduro en composición, como tratando de desmarcarse un poco de todo lo antes dicho pero sin ser insidioso ni maquinado para ese fin. Por ese lado gana Camila, porque a pesar de no abandonar la explosividad, incursiona en el uso de pigmentos electrónicos y deja un poco de lado la guitarra de palo, que pasa a ser un instrumento ocasional y casi circunstancial. En ese mismo orden aparece el desenfado de Tu Mamá te Mató y Libre y Estúpidos pero también la belleza de sensatez en Sin Mi, Piedad y Julia. Equilibrio.
Champs – Vamala
El descubrimiento —gracias a San Spotify— de Champs fue una de las primeras emociones del año. Encontrar a estas alturas de la vida una nueva banda que exija un espacio en los favoritos de tu corazón es realmente un milagro, que demuestra entre otras cosas que ser fanático de la música es algo que constantemente de dará alegrías. El sonido de Vamala se la juega por el pop de cámara, o sea, con instrumentación clásica como en Sophia (insuperable), Forever Be Upstanding By Your Door o Balfron Tower, un marcado sentido folk en Roll Me Out que recuerda a Simon & Garfunkel y al Bob Dylan del The Freewheelin’. Además de una mezcla de todo lo anterior en Vamala o Desire. Voces melodiosas y nostálgicas que juegan con el falsete y y nos recuerdan momentos ya vividos, en una especie de soundtrack de vida retroactivo.
Christina Rosenvinge – Lo Nuestro
Lo Nuestro, si bien, propone un cambio en el sonido de la madrileña, tiene episodios conciliadores y espacios luminosos increíbles, cajas de ritmos, guitarras acústicas pianos y destellos disonantes y cacofónicos. Las letras son inquietantes pero se acercan mucho a la perfección lírica en la descripción de esos temas pocos tratados en la música, y mucho menos en el pop. En síntesis un trabajo hecho con bastante precisión y preocupación, lo cual es de agradecer, de parte de una artista que ya va en su quincuagésima (por decir algo) reinvención.
Escribí más de este disco aquí
Chvrches – Every Open Eye
Chvrches, siempre fieles a sus influencias, (incluso en lo que parece ser un homenaje o reversión de esta clásica portada de New Order) quizás han errado en la forma, al menos para la prensa especializada que le llaman, y digo «al menos» porque a mi me ha parecido que Every Open Eye se ha llevado el premio al disco subvalorado del año… pero así es la crítica; un día en el cielo y al otro en el suelo. Aunque si somos sinceros es un álbum poco jugado, y esto pretendía al decir que eran fieles a su estilo o influencias. El poco sentido de la innovacion respecto a su anterior trabajo (The Bones of What You Believe 2013) puede ser su mayor debilidad… dependiendo del prisma en que se mire ya que para los más amantes de aquel perfecto trabajo de 2013, este se convierte en la nueva delicia del año. Incluso High Enough To Carry You Over no cantado por Lauren Mayberry tiene buena pinta. Paying Dead es robusta y agresiva pero a ratos te acaricia tiernamente. Empty Threat, mi favorita del álbum no deja un momento de respiro, te invita al baile o a correr sin cansarte. Insuperable el in crescendo de Clearest Blue al estilo de Theter. Luego están las ya clásicas Never Ending Circles, Leave a Trace, Keep You on My Side y casi todas, así que si andamos pendientes de lo que dice la crítica, especializada jovencitos, nos perderemos discos como este.
Deerhunter – Fading Frontier
Que es difícil justificar por qué a uno le gusta algo, como cierta comida, usar bigote o un disco de Deerhunter, seguro que toca alguna fibra, hace reaccionar algún químico en el cerebro, no sé. Tendríamos que hacer estudios de estadísticas con cablecitos en el cuerpo o ser científicos, biólogos o qué se yo. A lo mejor es bueno que no lo sepamos nunca, así no le quitamos el velo a esa emoción tan pura, casi infantil de oír algo que nos gusta. Algo como las guitarras soñadoras y a ratos emotivas, la batería extrañamente optimista y la peculiar voz que sale de esa reducida caja torácica.
Dënver – Sangre Cita
De las musicas chilenas los Dënver eran mis favoritos, ese Música Gramática Gimnasia del 2010 (hay que ver lo viejo que estamos) no lo puedo superar. Después de un correcto Fuera De Campo (2013), Milton y Mariana que han envejecido como nosotros, se han puesto a hacer cosas de grandes, y se han puesto sucios y perversos, de la misma forma que antes quizás, pero ahora ya sin restringirse en nada. Muchas de estas nuevas canciones van en esa dirección y en lo personal no han sido de todo mi agrado. Iguals hay temas re buenos, como Noche Profunda, que es lo más oscurito que hemos escuchado de Dënver, muy en el estilo de las composiciones solistas de Milton Mahan como Nva Orleans (Las caras de la muerte (2013)). De ahí saltamos al opuesto, con Al Fondo del Barro un tema de estandarte pop bailable y disco absoluto sobre ser rechazado y nunca saber lo que es ser amado. Bola Disco, más melodiosa, recuerda los inicios de Dënver, esos influenciados por La Casa Azúl y el pop español en general, que a estas alturas suena añejo, pero aún inolvidable. Mariana es más protagonista en este disco y se hace patente en varios temas. Su sensualidad ingenua en La última canción, que podría ser perfectamente cantada junto a Juliana Gattas por ese estilo tan marcadamente Miranda! en la melodía del tema. Por otra parte juguetona y coqueta se nos pone en Yo para ti no soy nadie aunque después como que cansa un poco el tema. En La Lava vuelve esa oscuridad encantadora con esos sonidos como de Tear For Fears y Talk Talk. Miguel Bosé a modo de aparición en Los Vampiros, en una canción que no da espacio para caer en la tristeza absoluta. Todo termina con el experimento llamado Sangrecita, que aún no termino de definir si es muy bacan o un broma, así como tampoco encuentro la parte donde cantaría PedroPiedra. Al final igual estoy prendado para siempre a Dënver, a menos que me defraudara al nivel de Gepe y siempre tendré que hablar de sus discos porque es como el primer amor diría yo.
Everything Everything – Get To Heaven
El espíritu de las canciones de Everything Everything siempre es avasallador y enérgico capaz de subirte el ánimo a las nubes. Y si eres de las personas que porta armas de alguna especie, das vueltas autos o chocas motos entonces es un disco que amarás. O quizás no, y soy yo el que tiene una vida muy pacífica y sin sobresaltos. Pero no me vengan a negar que To The Blade es bien ruda o que Distant Past y Blast Doors no dejan espacio para ponerse pajarón. Igual después como que el disco se va poniendo más cariñooooso y te deja hasta corearlo en Regret o Spring / Sun / Winter / Dread y que bacan es lo que hicieron con los tempos de la canción y la melodía en No Reptiles. Yo le doy veinte dolce vitas y un Palomita Blanca.
Mención especial para la portada, con un ilustración del un neozelandés seco, Andrew Archer.
Mac Demarco – Another One
Estuve a puuunto de ir a ver Mac Demarco a Primavera Fauna pero me tuve que quedar con las ganas, piola y mirando el streaming de Movistar… al menos. Una de las cosas que más deseaba era recibir en vivo y en directo esa buena onda que Mac transmite en sus discos, quería irme en la volá, como dicen los lolos de los 90. Himnos del relajo post día maldito en la pega, la escuela o lo que sea. Las guitarra de canciones como Another One o A Heart Like Hers guardan su lado creepy y tenebroso con esos riff de guitarra cansada y estirada, muy amigas de otro raritos, Connan Mockasin y Daniel Johnston. Aunque siendo bien sinceros, siempre vamos a querer los discos de Mac, aunque no tengamos mucho que picarle porque es como si el amigo más buena onda que tengas se ponga a cantar canciones en las juntas, siempre terminas haciéndole caso y te unes en los coros.
Lana Del Rey – Honeymoon
Soy un Lanalover, lo asumo y salgo del closet Lana aquí y ahora. Es que cómo no amarla, y cuando uno ama transforma todo lo que la otra persona hace en algo positivo aunque sea la cosa más inútil y aburrida. Honeymoon, aunque más errático que Ultraviolence, tiene tremendísimas canciones hechas para llorar democion. La misma que da nombre al disco, podría hacer dormir a cualquier mortal pero a mí me parece una compleja pieza con tiempos definidos y hermosos momentos, como la marcha a partir de la tercera estrofa y el cambio sutil que da paso al scatting final. O God Knows I Tried que tiene esa cadencia dolorosa de canto góspel en plena época de esclavitud. Los saxos sensuales de Terrence Loves You. La incorporación de instrumentos que le aportan jazz y swing a 24 antes de un abrupto final. Impecables Art Deco, High By The Beach, Music To Watch Boys To, The Blackest Day y mi favorita, Salvatore, que en mi mente es donde Lana tiene una romántica y peligrosa cita con un Corleone tomandose un gelato al cioccolato. Si me ayudan con un suspiro seguro podría estar todo un día hablando de Honeymoon y toda una vida de Lana.
Sufjan Stevens – Carrie & Lowell
Carrie & Lowell es un disco que trata sobre las vivencias de Sufjan con su madre, Carrie, que lo abandonó cuando él tenía solo un año. Y es por eso que la relación de Sufjan con ella tiene más de tristezas que de alegrías, una relación que se limitaba a encuentros aislados y escasa comunicación mediante una que otra carta. Y mientras él temía poder padecer los mismos males de su madre, ella muere. Pero él pasa a acompañarla en sus últimos días de agonía, encuentro mediado por su padrastro, Lowell. Es por eso; el remezón, la sacudida emocional, que nacieron las canciones que dan delicada forma este disco, fabricado con tierna artesanía, como con los dedos de una persona sobrecogedoramente frágil, de sensibilidad atípica y sutileza conmovedora. Su belleza y encanto quiebran y nos hace poner los pies en la tierra para darnos cuenta de lo tontos que hemos sido al dejar de ver a nuestra familia, abrazar a nuestros padres, hermanos y amigos más seguido.
Miami Horror – All Posible Futures
Un disco que gana en atmósferas y teclados y por lo mismo en los puentes en los que estos son protagonistas. Bailable a más no poder hasta el punto de recordar al Michael Jackson más disco en canciones como Love Like Mine que parece que en cualquier momento van a frasear mamasse mamuhsa memaht husah. Cellophane otra pieza de sofisticada pista de baile. Muy conscientes de la música disco, Another rise, another fall es tan ELO que dan ganas de subirse a una estación espacial. Who is gonna save us? es un in crescendo que se desata magníficamente, tal como mi favorita del disco, Forever Ever?… siempre mis favoritas son las del final, me gustan los finales de discos, históricamente. Debe ser que me es satisfactoria la sensación melancólica del fin de un algo. Otras buenas: American Dream / Wild Motion (Set It Free) / All It Ever Was / Real Slow. Ya les dije la extención del texto no habla de la calidad del disco. Este está bueno, pero bueno-bueno.
Dúo Niágara – Dúo Niágara
La vida de una Briceñora es más dura que la cara de Sergio Jadue. Hay que aguantar las críticas de los que dicen que Cristobal no es talentoso, que su voz es como la de Bosé o Juanga, como si eso fuera malo, si es bacan. Y como si todo este padecimiento fuera poco el niño se porta mal, viene y trata como el ajo a la gente por feis y le dice que googleen y no anden haciendo preguntas tontas, penseque amigo del tonteque y todo eso. Cuesta defender a alguien tan así cachai? Pero nimporta, una Briceñora se siente pagada cuando salen canciones nuevas de Cristobal, sean como sean y las haga con el compañero que quiera, porque además de todo lo anterior una Briceñora le agradece que sea un promiscuo de la música y sea capaz de mantener ocho o nueve casas, o sea, proyectos musicales. Dúo Niágara, el último que ha salido hasta el momento de escribir esto,contiene canciones con el inconfundible estilo de contar sus historias como en Escultores en la parroquia que es invitación a saquear las reliquias de una iglesia, la frase final es decidora «tienes que rebuscarte cuando odias los Fondart»; escultores buscando financiamiento de la forma menos politicamente correcta para hacer la más absurdas de las esculturas en la más ciudad random del país. Un nuevo paseo por Santiago en Frente a un mural. El raro romanticismo de Briceño en la ya clásica Ojitos de marihuanera… y así, otra delicia para los Briceñolovers. Ojo con el track oculto al final, Briceño experimentals.
Grimes – Art Angels
No sé mucho de Grimes, lo que mueve ni lo que come para hacer lo que hace pero cuando Art Angels comenzó a sonar en mis oídos fue como una demolición, de verdad. Hace tiempo no había llegado a mí un disco tan de impacto como este. A veces te da rabia y te llega a molestar de lo ruidoso que puede ser pero a la vez eso mismo tiene un extraño atractivo y un inevitable adicción, algo así como lo que me pasó cuando escuchábamos el debut de Crystal Castles. Art Angles es un disco con un pulso increíble, que va dando más de sí con cada elección y repetición que se le va haciendo. Favoritas, casi todas. favorita de favoritas, Butterfly.
Purity Ring – Another Eternity
Este disco no sé venderlo pero ándate cabrito que está bueno, quizás más que algunos de los que escribí mucho. Borren todo lo que dije y escuchen esto o morirán. Eso no más les digo.
Palabras que se me ocurren mientras lo oigo: elegancia, simetría, perfección. No soy muy bueno con las palabras.
Natalia Lafourcade – Hasta La Raíz
Un disco que lo compuso mientras trabajaba y promocionaba su anterior álbum, Mujer Divina (2012) el exquisito tributo a la leyenda de la música latina, Agustín Lara. En Hasta La Raiz Lafourcade, escarba, extrae y rescata el folklor mexicano y latinoamericano en gran parte de su nuevo álbum, sin dejar de lado la fibra pop. La canción que da nombre disco por ejemplo es una hermosa oda a paisajes naturales y a sus fundamentos, la raíces, que guardan aquel amor que la marcó y que a pesar de haber vivido nuevas experiencias jamás olvida. Fiel ejemplo de que no abandona el pop latinoamericano es Nunca es suficiente que tiene olor a Tormenta y ese clásico hit ochentero, Adiós chico de mi barrio o sutiles baladas como el bossanova de Para Qué Sufrir. Atrás quedaron los sonidos de aquel En el 2000, hoy Natalia es más grande, madura, con una lucidez a ratos estremecedora en las letras pero mantieniendo la chispeza de los inicios.
Marina and The Diamonds – Froot
Algo pasa con las carreras de estas estrellas pop que no logran remontar ¿Será que están hechas para brillar pero no para todo el mundo? La situación es que a chicas como Marina les salen tremendos temas pop pero jamás de los jamases han podido salir de ese espacio, digamos pequeño llamado, pop alternativo ¿por qué? Las líneas musicales en las que se pasea no tienen mucha diferencia con un tema de pop comercial y rompe rankings. Hablemos por ejemplo de la misma FROOT, un single sublime, consecuente e inteligente en la lírica (foro buscar canciones traducidas) que exuda esplendor pop por donde se le agarre, hecho para que todo el mundo lo esté bailando como si de uno de los últimos de SIA se tratase, pero no. Solo aquellos que nos dimos el tiempo y que nos fascina descubrir sonidos fuimos capaces de captarla, atesorarla y guardarla.Sobre qué es lo que le pasa a la carrera de Marina se puede especular mucho pero entrando en tierra firme este nuevo trabajo es mucho más que este single (repetimos: perfecto.) Happy, que como si hubiese sido escrita y compuesta en un universo paralelo al de Pharrel Williams, es nada menos que una balada que deja un sabor de interesante como génesis de un disco que apuesta por el baile, un tema que no hubiese caído tan bien en otra posición. O I’m Ruin, una apropiada canción pop de sofisticación con excelente elección de puentes y coros, sin abandonar los clichés del buen pop,hablo de los yeah, los uhuu, y las ahaa. Guitarras y la voz frágil en un principio y potente a medida que avanza la canción. Pienso en este album como uno muy poco valorado para lo bien hecho que se está. Eso. Fin.
Tame Impala – Currents
Debo ser parte del último grupo (si es que existe esa división) que descubrió a Tame Impala. Y no es que antes no los ubicara, solo que no me terminaba de cerrar su música. Con Currents la cosa cambió, insisto, al menos para mí. La jugada, arriesgada, de llevar lo que hacían el siguiente temido nivel, es decir, el comercial, les salió muy buena. Los antiguos fans pueden ser muy duros al respecto, i know that feel bro, pero Currents se ha transformado en uno de los mejores discos del año para todo el mundo, casi sin baches para ser un álbum perfecto. De principio a fin sorprende por la gracia con que fue elaborado. Currents podría ser el nuevo AM (tan amado como odiado), pero AM me sirvió para mostrar la música que escucho sin que me la encuentren rarita. Me gusta Currents de principio a fin y eso es todo lo que puedo decir sin empezar a meterme innecesariamente en un bosque de análisis del que siempre me cuesta salir. Confíen en mí, es lo mejor que han escuchado en mucho tiempo. Como dice Huachimingo, Les juro que es verdad.
Tus amigos nuevos – Triunfo Moral
Que buen título es el que se sacaron TAN. Lleno de fuerza y locura, más incluso que en No Sí Son (2013) que ya era loquillo y pasado de revoluciones. En esta se destacan los temones Jaleo con esas guitarras desenfadadas y las frases únicas, “Tenme en cuenta en tus oraciones, si es que te queda alguna. Que sigo parte de este circo pobre y no recé ningúna. Me saqué la lotería contigo”. Incansables en Paraná. O Delfin que a punta de bajo guarda mi frase favorita del año “Soy zalamero como un delfín. Estoy flameando como blusas limpias”. Más experimentales en Techno Rengo con ese delay infinito y claro, la frase final… te está saliendo sangre de la nariz, disculpa, es que aun no entiendo tu forma de quererme. Mortal. Y Acompañado del manso videoclip, Pateando Petróleo es de lo mejor con esa técnica vocal tan divertida en donde escuchamos “Que triste es siempre trabajar en lo mismo pero es más triste no poder trabajar” o la perfecta imagen loserboy (soy un loserboy) “Si tú estás sola entonces yo no estoy solo, saberlo siempre es un triunfito moral”. Como dice la carátula, bajo ese pirigüin, Producto de Chile… al 100%. Muchos queques con manjar para Diego Lorenzini y sus amigos.
The Vaccines – English Graffiti
English Grafitti tiene muchas buenas impresiones instantáneas, dignas de un buen disco pop. La intro ágil de Handsome a la par con 20/20, o las guitarras estilo de Arctic Monkeys en las correctas Dream Lover y Minimal Affection, esta última haciendo observaciones a nuestra interacción con las redes sociales y los problemas que produce en nuestras relaciones de la vida real. Con la tierna y romática (All Afternoon) In Love, una de mis favoritas, vuelve el recuerdo de Arctic Monkeys como si fuera una nueva I Wanna Be Yours, otro himno futuro de amor hipster. Want You So Bad, Maybe I Could Hold You y Miracle van ganando riqueza y se vuelven más hipnóticas al ritmo de las repeticiones que se le hagan.
BONUS
Otros discos que me gustan demasiado pero que no tengo idea como venderlos. No tengo tanto bla bla. Esto me dejó exhausto. I got blisters on my fingers.
The Dø – Shake Shook Shaken
Porqué nadie le hace justicia a The Dø?
Jose Gonzalez – Vestiges & Claws
Buena música, canciones perfectas que se harán inmortales como todas las canciones de José Gonzalez. Open Book, una de las más bellas del año.
San Cisco – Gracetown
Están más grandes los cabros, si siguen en esa vía van a ganar harta platita… mmm platita.
Tobias Jesso Jr. – Goon
Este disco lo tengo en reserva para el próximo año.
The Weeknd – Beauty Behind The Madness
A años luz de la trilogía igual está bien excecutado
Paneta No – Odio
Imposible no amar el Odio de estos chilenos. Canciones repletas de vibraciones y sentimientos post adolescentes que nos acompañan por toda la vida. Seguro que me arrepentiré de no haber escrito más cosas sobre Odio.
Father John Misty – I Love You, Honeybear
Demás que si el próximo año me enamoro tomaré este disco, lo traduciré completo y le diré todos esos raros piropos a ella. Quizás me enamore solo para hacer esto. Me acordé de esa gran frase de poeta guatemalteco “no te enamoraste de mí, sino de ti cuando estás conmigo”… vah na que ver.